Las nuevas tecnologías, Internet y las redes sociales se han instalado de pleno en nuestra sociedad, y lo cierto es que tienen muchas ventajas y nos facilitan la vida en muchos aspectos. Hoy en día nos es posible interaccionar con otras personas desde la distancia, recuperar el contacto con otra persona, hablar con todos nuestros amigos a la vez, mandar fotos y vídeos instantáneamente e incluso cotillear. 
 

Las redes sociales no son mas que herramientas de comunicación y socialización virtuales, pero en muchas ocasiones pueden ejercer de facilitadores de posibles problemas de pareja y/o infidelidades. Pero ¿qué significa ser infiel? Es importante que los dos miembros de la pareja tengan un concepto similar acerca de la fidelidad o de las normas que han de regir su relación.

Hace unos años, antes de la revolución tecnológica de las redes sociales este concepto solía coincidir, pero en la actualidad los límites en cuanto a lo que se debe y no se debe hacer están más difusos. Las parejas pueden no abordar este tema y de esta forma llegar a conflictos porque una de las partes ha hecho algo con lo que el otro miembro no está de acuerdo. 
 
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Existen muchas situaciones conflictivas, por ejemplo el contacto a través de Facebook, Twitter o Whatsapp con una expareja. Dada la facilidad para obtener información que nos ofrecen las redes sociales, mucha gente intenta contactar de esta forma. 
 
En este punto es importante diferenciar entre «el mundo real» y «el mundo virtual» y nunca hacer virtualmente lo que no se quiera hacer realmente. Es decir, si no estas dispuesto a quedar con un ex, ¿por qué intercambiar mensajes? Un acto en principio inocente como este puede acarrear problemas, sobretodo si la pareja llega a enterarse. Por esto es necesario que exista una buena comunicación en la pareja y que se aborden temas sobre que límites cruzar y cuales no. 
 
Debe resaltarse que no existen dos parejas iguales, y que las creencias y formas de ver el mundo y su relación determinaran lo que aceptan en su relación y lo que no.
 
Las redes sociales forman hoy en día parte de nuestra vida y por lo tanto hay que aceptarlas y aprovecharnos de lo que nos ofrecen, pero hay que tener en cuenta una serie de pautas a cumplir para que nuestras relaciones afectivas no se desmoronen. En primer lugar trabajar para mejorar la comunicación en pareja, hablar de límites, contar lo que hacemos sin mentiras y sobretodo no dejar de confiar en el otro. En segundo lugar reflexionar cuando hacemos algo en las redes sociales, ya que esta conducta suele ser muy impulsiva y no se valoran los pros y contras de nuestras acciones en la vida virtual. 
 
«Tengo miedo del día en que la tecnología sobrepase la interacción humana, entonces el mundo tendrá una generación de idiotas» Albert Einstein. 
 
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